El uso de internet se ha convertido en una parte esencial de nuestro día a día. Esto también significa que nos enfrentamos a más amenazas online que nunca antes. Si bien uno no puede protegerse en todo momento, existen algunas medidas sencillas que puedes tomar para asegurarte de que estás usando internet de la manera más segura posible.
1: Mantén tu dispositivo actualizado
Es importante asegurarte de que tu ordenador y móvil se encuentran al día con las últimas actualizaciones de software y hardware. Muchos fabricantes incluyen parches de seguridad en sus actualizaciones automáticas para asegurar que los dispositivos estén protegidos. Contar con un dispositivo actualizado te garantiza que está protegido de la forma más potente posible.
2: Usa contraseñas seguras
Una contraseña segura es fundamental para cerciorarte de que tus cuentas online están protegidas correctamente. Cuanto más larga y compleja sea la contraseña, mejor. Intenta no utilizar la misma contraseña en cuentas diferentes: así reducirás el riesgo de que varias de tus cuentas se vean amenazadas por el robo de una contraseña.
3: Piénsalo bien antes de hacer clic en enlaces y archivos adjuntos
La causa principal de malware y virus en dispositivos son los emails con archivos adjuntos maliciosos. Sé siempre precavido al abrir emails de personas que no conoces, y si un email o archivo adjunto parece sospechoso, piénsatelo dos veces antes de abrirlo.
4: Sé precavido contra el phishing
El phishing tiene lugar cuando una persona malintencionada intenta encontrar y utilizar información sobre ti para suplantar tu identidad o estafarte. Infórmate acerca de quién te está pidiendo tus datos en internet. Si estás visitando un sitio que parece sospechoso y te pide introducir datos financieros, deberías tomártelo como una señal de alarma. Esto también se aplica a un email no solicitado que te pide datos personales. Siempre que recibas una solicitud de información, analiza la fuente y nunca temas decir no o pedir más información.
5: Presta atención a si la página está cifrada
Los sitios web pueden no estar cifrados (HTTP) o sí estarlo (HTTPS). Al navegar en una página que te pida que introduzcas tus datos, comprueba siempre si la página está cifrada. Puedes hacer esto comprobando el principio de la URL de la página web. Por ejemplo, una página no cifrada de Google sería http://www.google.com, mientras que la página cifrada sería https://www.google.com.
6: Utiliza el wifi público de forma prudente
Cuando te conectas a una red pública de wifi, te estás conectando a una red usada por muchas otras personas. Aunque la mayoría de las redes públicas cuentan con un cierto grado de seguridad, debes estar siempre alerta de los usuarios maliciosos en esa misma red que puedan espiar tu uso de internet. Ten precaución siempre que inicies sesión en un sitio web financiero o en sitios web en los que debes introducir información confidencial. Siempre que sea posible, intenta acceder a estas webs desde la red de tu casa.
7: Reflexiona antes de publicar información confidencial o financiera
Al utilizar páginas públicas, especialmente redes sociales, considera la información que estás compartiendo. Una vez que la información se guarda en esos sitios, suele almacenarse para siempre. Piénsalo dos veces antes de publicar información confidencial o financiera en sitios públicos.
8: No dudes en pedir ayuda
Existen numerosos sitios web que ofrecen más información sobre cómo protegerte online.