Spread (definición)

¿Qué es el spread bid-offer?

El spread bid-offer, también conocido como el spread bid-ask, es otro modo de hablar del spread que se aplica al precio de un activo.

El spread bid-offer es una representación de la oferta y demanda de un activo. Si los precios bid y offer están cerca, se considera que el mercado es reducido, lo que significa que existe un consenso entre los compradores y vendedores con respecto a cuánto vale dicho activo. Si el spread es más amplio, esto significa que existe una diferencia de opiniones importante.

Existen varios factores que pueden tener un impacto en el spread bid-ask:

1. Liquidez: se refiere a la facilidad con la que se compra o vende un activo. Cuanto mayor sea la liquidez de un activo, más reducido será el spread bid-ask.
2. Volumen: Este es un modo de conocer cuánto se opera con un activo diariamente. Los activos con los que se opera en mayor cantidad cuentan con un spread bid-offer más alto.
3. Volatilidad. Mide cuánto cambian los precios de mercado durante un periodo determinado. Durante las épocas de alta volatilidad, cuando los precios cambian de manera rápida, el spread normalmente es más amplio.

Comisiones de spread

Con el spread, los inversores pagan por ejecutar una posición. Para algunos de los activos, como las acciones, los proveedores no cobrarán un spread, sino una comisión. Otros activos pueden incurrir en una mezcla de ambos.

Cuando se opera con productos con spreads, el inversor espera que el precio de mercado supere el precio del spread. Si esto sucede, puede cerrar la posición y obtener beneficios. Si el precio no supera el coste del spread, el inversor podría cerrar su posición con pérdidas, incluso si el mercado se mueve en la dirección predicha.

Ejemplo de un spread bid-offer

Echemos un vistazo a un spread bid-offer con IG. En el ejemplo que se encuentra a continuación, puedes ver la diferencia entre el precio de mercado subyacente, que es 1339,10$, y el precio al que un inversor estaría abriendo una posición.

En este caso, el spread es de 0,3 puntos, por lo que se han añadido 0,15 puntos en ambos lados del precio subyacente. Si un inversor quisiese abrir una posición larga, comprarían el activo a 1339,25 y, si quisiese abrir una posición corta, lo venderían a 1338,95.