En este apartado analizaremos otros cuatro patrones comúnmente identificados por los analistas técnicos.

Triángulos

Se producen cuando un precio de mercado empieza a converger hacia un único punto. El modo en que se forma el triángulo puede dar una idea de hacia dónde puede dirigirse el precio. Hay tres tipos principales:

Los triángulos ascendentes se forman cuando el mercado alcanza un fuerte nivel de resistencia horizontal pero una serie de mínimos más altos indica que el precio está convergiendo hacia él. Este patrón suele indicar que el precio seguirá subiendo, pero ten en cuenta que puede que el nivel de resistencia sea demasiado fuerte, lo que provocaría un rebote del precio. Por lo general, una forma prudente de tomar decisiones en torno a figuras de triángulos consiste en esperar hasta que se forme el patrón y, a continuación, tomar una posición desde el punto de ruptura.

Los triángulos descendentes funcionan de forma opuesta a los triángulos ascendentes. El mercado alcanza un nivel de soporte, pero una serie de picos sucesivamente inferiores sugiere que el precio bajará.

Los triángulos simétricos se producen cuando el precio parece converger con una serie de picos más bajos y mínimos más altos. Se trata de un patrón de continuación, lo que significa que el mercado seguramente siga en la misma dirección que la tendencia general una vez que se haya formado el patrón.

Si no hay ninguna tendencia clara antes del triángulo, el mercado tiene las mismas probabilidades de romper tanto al alza como a la baja.

Rectángulos

Parecidos a los triángulos simétricos, los rectángulos son patrones de continuación que señalan un período de consolidación en la tendencia actual antes de que el precio siga yendo al alza o a la baja. Tras un movimiento brusco, los mercados suelen operar en un estrecho rango entre los niveles de soporte y resistencia, creando una forma rectangular muy clara. A continuación, el mercado tiende a seguir en la misma dirección.

Cuñas

Estos patrones, que no deben confundirse con triángulos, se forman cuando el precio de un mercado empieza a estrecharse en un ajustado rango entre dos líneas de tendencias pronunciadas.

Las cuñas ascendentes se producen entre dos líneas inclinadas hacia arriba de soporte y resistencia. En este caso, la línea de soporte es más pronunciada que la línea de resistencia. Este patrón suele señalar que el precio bajará.

Las cuñas descendentes se producen entre dos niveles inclinados hacia abajo. En este caso, la línea de resistencia es más pronunciada que la línea de soporte y generalmente indica que el precio subirá.

Recuerda: los patrones gráficos no son infalibles

Tal y como vimos en la sección anterior, los patrones gráficos son meras señales de hacia dónde puede dirigirse el precio de un activo en el futuro. Con todos los patrones gráficos se recomienda esperar hasta que la dirección del movimiento se haya establecido antes de realizar una operación.

En algunos casos, cuando parece probable que se produzca una ruptura, puede ser una buena estrategia colocar las órdenes a cualquier lado de la línea de soporte/resistencia/tendencia. A continuación, cuando se active una de las órdenes, podrás cancelar el resto, con la esperanza de alcanzar el punto de ruptura independientemente de hacia dónde vaya. No obstante, esta estrategia sigue siendo susceptible a fakeouts, por lo que es importante poner stops al abrir la posición para poder limitar su riesgo.