Al Ibex 35 le cuesta dejar atrás los números rojos tras el desplome histórico del sector servicios

• A las 11:41 horas, el Ibex 35 cede un 0,44%, hasta los 6.718 puntos.
• El PMI del sector servicios de España se desploma hasta mínimos históricos y hace peligrar una rápida recuperación económica.
• El precio de las acciones de Repsol sigue rebotando, mientras que Siemens Gamesa lidera las caídas tras presentar resultados.

Las bolsas europeas se desmarcaban del resto de mercados mundiales al comienzo de la sesión e iniciaban la jornada en negativo, castigadas por los malos datos macroeconómicos que se siguen publicando en el Viejo Continente.

El desplome de los pedidos a fábrica en Alemania ya en el mes de marzo en un 15% -el dato de abril puede ser demoledor- ensombreció el ánimo en una región que, como suele ser habitual, además de los problemas que afronta el resto del mundo, suma los suyos propios, tras la decisión del Constitucional alemán de cuestionar la legitimidad de los programas de compra de bonos del Banco Central Europeo (BCE).

Sin embargo, la confirmación del mayor desplome de la actividad económica de la eurozona ha servido para paliar ligeramente los ánimos y ha permitido a los grandes selectivos europeos minimizar las pérdidas o asomarse incluso tímidamente a los números verdes, tras ver cómo los datos definitivos de los índices de gestores de compras (PMI) son ligeramente superiores a lo apuntado inicialmente.

La imagen es desoladora, pero el mercado temía que fuera aún peor de lo esbozado en la previsión inicial. De este modo, el PMI compuesto de la eurozona en el mes de abril detiene su caída en los 13,6 puntos, una décima por encima de lo anticipado, mientras que el de Alemania lo hace en los 17,4, en lugar de caer hasta los 17,1 enteros que ya se habían descontado.

En el caso del sector servicios, el de la eurozona se queda en los 12 (vs. 11,7), el de Alemania en los 16,2 (vs. 15,9), mientras que el de Italia retrocede hasta los 10,8 puntos, casi dos puntos más que los 9,0 previstos.

Markit dice que el PIB de España se contrae a un ritmo del 7% y pone en duda la recuperación

Sin embargo, el golpe está siendo más duro de lo esperado para Francia, con una lectura para el sector terciario de 10,2, frente a los 10,4, y sobre todo para España, cuya lectura final de 7,1 puntos se queda muy lejos, casi tres décimas completas, de los 10 enteros calculados.

Más duros han resultado los comentarios al respecto realizados por la consultora privada Markit, entidad encargada de elaborar este indicador y que estima que el PIB de España se estaría contrayendo actualmente a un ritmo del 7%.

Apuntan, además, que este cálculo podría ser considerado “conservador” y que, dada la pérdida de empleo y el enorme pesimismo empresarial sobre el futuro, existen “notables dudas sobre la fortaleza de una recuperación económica”.

El Ibex 35% lidera las caídas en Europa, pese a que las acciones de Repsol dan continuidad al rebote

Así las cosas, el Ibex 35 vuelve a distinguirse como el peor parado de Europa, con una caída a las 11:41 horas del 0,44%, hasta los 6.718 puntos, por delante del Cac 40 francés (-0,31%), el paneuropeo Euro Stoxx 50 (-0,24%) y el Dax 30 alemán (-0,07%).

Por su parte, el FTSE MIB italiano se desmarca con un rebote del 0,25%, mientras que el FTSE 100 británico sigue aprovechándose de la debilidad de la libra esterlina para recuperar posiciones (+0,42%).

Dentro del selectivo español, Repsol sigue sacando partido a los resultados presentados ayer y a las menores presiones sobre los precios del crudo para volver a encabezar las subidas con un rebote del 4,14%, seguido por la constructora ACS (+2,14%) y Banco Sabadell (+1,45%).

Las acciones de Siemens Gamesa caen un 3% tras cerrar el trimestre con pérdidas

En la otra cara de la moneda, media decena de compañías presenta retrocesos superiores al 2%, entre los que destacan las caídas del grupo hotelero Meliá Hotels, con un retroceso del 2,76% y el fabricante de aerogeneradores Siemens Gamesa, que cede un 3,19% tras presentar resultados.

La compañía no ha mostrado unas malas perspectivas a largo plazo -sigue incrementado su cartera de pedidos-, pero, en el corto plazo, la situación le pasa factura. En concreto, la crisis del coronavirus ha tenido un impactado estimado en sus cuentas de 56 millones de euros, que le ha llevado a registrar unas pérdidas netas de 167 millones de euros en el segundo trimestre de su ejercicio fiscal.

Estos números rojos al final de su cuenta de resultados han pillado con el pie cambiado a los inversores, al igual que la evolución de sus ingresos. El mercado ya se había mentalizado para ver una ligera caída en sus ventas, hasta los 2.300 millones de euros, pero dicho deterioro se ha ido finalmente hasta los 2.204 millones, un 7,8% menos que en el mismo periodo del año anterior.

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