- La posible vuelta a las negociaciones entre China y Estados Unidos impulsa a los valores industriales estadounidenses.
- Sin embargo, la posibilidad de que Trump aumente los aranceles sobre productos chinos golpea las bolsas del gigante asiático.
- Apple sube un 4% en el pre mercado y apunta a los 200 dólares.
- La Reserva Federal estadounidense anuncia hoy las decisiones adoptadas en la última reunión del FOMC.
- El inesperado aumento de los inventarios en EE.UU. da continuidad a las ventas en el crudo.
Las tensiones comerciales ente Estados Unidos y China vuelven a acaparar la atención del mercado y a marcar el ritmo en las principales bursátiles del mundo. En la tarde de ayer, a escasos minutos del comienzo de la sesión, Bloomberg aseguraba que ambas potencias económicas estarían en la actualidad limando asperezas de cara a poder retomar las negociaciones en materia de política comercial. Este hecho, dio alas a las acciones estadounidenses, que disfrutaron de una sesión netamente alcista.
Las empresas de pequeña capitalización fueron las más favorecidas por el aparente deshielo de las relaciones entre las dos mayores economías del mundo y el Russell 2000 puso fin a la sesión con un avance del 1,02%, por delante del Nasdaq (+0,55%), del S&P 500 (+0,49%) y del Dow Jones (+0,43%).
Sin embargo, tras el toque de campana, el optimismo del mercado ante el posible acercamiento de posturas entra China y el Estados Unidos mutó en nuevas preocupaciones, alimentadas por los rumores de que la Administración Trump esté preparando un incremento de los aranceles sobre los productos chinos por valor de 200.000 millones de dólares.
La publicación del índice PMI elaborado por Caixin, que muestra el estancamiento del sector manufacturero de china, acabó por lastrar definitivamente el ánimo de los inversores asiáticos y las órdenes de venta inundaron los mercados chinos.
Japón y Corea del Sur, con notables avances del 0,83% y del 0,51% para el Nikkei 225 y el Kospi, respectivamente, pudieron escapar de los números rojos, pero las principales referencias del continente cayeron más en torno a un 2%. El peor parado fue el China A50, con una caída del 2,34%, seguido por el Shenzhen composite (-1,89%), el índice de Shanghái (-1,81%) y el Hang Seng de Hong Kong (-1,05%).
La noche también dejó noticias de gran calado a nivel corporativo, con los resultados de Apple. La firma de la manzana registró un récord de ventas en el tercer trimestre de su ejercicio fiscal, tras incrementar sus ventas entre abril y junio un 17%, hasta los 53.265 millones de dólares. Del mismo modo, el fabricante californiano vio cómo su beneficio neto se elevaba un 32%, hasta superar los 11.500 millones de dólares.
Los inversores, gratamente sorprendidos, premian las cuentas del fabricante del iPhone con compras masivas en el pre mercado, que elevan el precio de la acción más de un 4% antes de la apertura y lo sitúan al borde de la imponente barrera de los 200 dólares por acción.
En la apertura del mercado europeo, las dudas se instalan en los principales índices, que se mueven con ligeras pérdidas tras conocer los datos mixtos que arroja el sector manufacturero de las grandes economías de la región. Aunque la actividad fabril se mantiene en expansión en todos los casos, el índice PMI elaborado por Markit muestra una desaceleración del sector secundario en Alemania, Italia y España, que no logra compensar el mejor resultado de Francia.
De este modo, París es la única gran plaza europea que negocia en positivo pasada la primera hora de negociación (+0,16%), frente a las pérdidas registradas en Londres (-0,74%), Milán (-0,50%), Frankfurt (-0,13%) y Madrid (-0,15%).
En el mercado de divisas, el dólar sigue ganando terreno y logra finalmente derribar al euro del nivel 1,17 dólares, mientras que la libra minimiza pérdidas sobre los 1,31 dólares, apoyada en el fuerte incremento de los precios de la vivienda en el Reino Unido publicado hoy por la Nationwide Housing Society.
El plato fuerte del día será la publicación del comunicado del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos. En esta ocasión, el mercado no tiene grandes expectativas sobre los resultados de este encuentro, pero la interpretación del lenguaje del comunicado emitido por el banco central suele provocar movimientos destacables en el mercado de divisas.
Por su parte, en el mercado de materias primas, los osos siguen campando a sus anchas en el crudo. Las órdenes de venta comenzaron a amontonarse en el día de ayer, después de que un sondeo realizado por Reuters avanzase un máximo anual de producción en los países de la OPEP en el mes de julio.
A última hora de la tarde, los bajistas recibían el respaldo definitivo con los datos de reservas semanales del API. Según los cálculos de los industriales, los inventarios de crudo en Estados Unidos se incrementaron en más de 5,5 millones de barriles la pasada semana, en vez de contraerse en torno a los 3 millones de barriles como auguraba el mercado. A la espera de conocer los datos oficiales que el Gobierno publicará hoy a las 16.30 horas, el crudo ligero estadounidense negocia un 0,65% a la baja en los 68,31 dólares; mientras que el Brent europeo registra una caída del 0,54%, hasta los 73,81 dólares por barril.
Ventas masivas también en el mercado de las criptomonedas. El Bitcoin suma una nueva jornada a la baja y, tras perder el nivel psicológico de los 8.000 dólares y el soporte de los 7.800, acumula un descenso próximo al 6%, cerca ya de los 7.600 dólares por unidad. Caída también para el Ethereum, que pierde más de un 5% y se sitúa ya por debajo de los 425 dólares por token.