Estados Unidos vuelve a amenazar a Europa con aranceles por valor de 3.100 millones de dólares

• El Gobierno de Estados Unidos centra su propuesta de aranceles en los productos de España, Francia, Alemania y Reino Unido.
• Afectaría especialmente a productos agroalimentarios y bebidas alcohólicas y podrían llegar a gravar el 100% de su precio de entrada en el país.
• Parece poco probable que Trump quiera una guerra comercial ahora, pero el mercado se inquieta ante esta posibilidad.

Es uno de los temas recurrentes desde la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca, pero no por ello deja de atemorizar a los mercados cada vez que sale a la palestra. Según una nota publicada por la Oficina del Representante de Comercio estadounidense, Estados Unidos estaría estudiando la posibilidad de imponer nuevos aranceles a determinados productos importados desde Europa.

En concreto, la medida afectaría a exportaciones de productos manufacturados en el Viejo Continente por valor de unos 3.100 millones de dólares y que afectarían, fundamentalmente, a España, Francia, Alemania y Reino Unido.

Esta iniciativa se enmarcaría dentro de la disputa que mantienen desde más de diez años a ambos lados del Atlántico en relación a las subvenciones concedidas al sector aeroespacial y que se siguen dirimiendo todavía en el seno de la Organización Mundial del Comercio (OMC).

Entre los artículos incluidos en este listado estarían productos como yogurt, quesos, derivados del cerdo, mariscos, aceitunas, aceite de oliva, café o determinadas bebidas alcohólicas, para los que se les propone un arancel adicional de entre el 15% y el 25%.

Pero más preocupante sería la situación de un segundo listado de productos señales para ser susceptibles de aplicación de un gravamen del 100%, lo que en la práctica supondría duplicar su precio con la entrada en Estados Unidos.

En este segundo grupo, se incluirían todo lo que tiene que ver con la industria aeronáuticas, como aviones y helicópteros, además un nuevo listado de productos de la industria de alimentación y bebidas como el vino, el queso, la cerveza o la mermelada, además de otros industriales como la cerámica o el vidrio.

Donald Trump retoma el discurso proteccionista en plena pre campaña electoral

Durante su primera campaña electoral, hace ahora ya cuatro años, Donald Trump centró gran parte de la estrategia que finalmente le haría alzarse con la victoria en un discurso extremadamente proteccionista, con el objetivo de ganarse el apoyo de las zonas rurales del centro del país y de los trabajadores de los cinturones industriales de las grandes urbes.

Ahora, con el mandatario perdiendo fuelle en las principales encuestas frente al candidato demócrata, Joe Biden, Trump parece querer recuperar la misma retórica del enemigo exterior que se aprovecha del ciudadano trabajador estadounidense con prácticas desleales.

Además, esta propuesta llega justo después de que la Administración Trump haya dado por rotas las conversaciones con Europa respecto a la imposición de la conocida como Tasa Google, y tan solo unos días después que su principal asesor comercial, el halcón Peter Navarro, hiciera saltar las alarmas del mercado al dar por muerto el acuerdo alcanzado con China a principios de año, algo que sería desmentido horas después por el propio Trump.

Trump siempre consideró que las prácticas comerciales europeas peores que las de China

En cualquier caso, la fijación de Trump con Europa y, especialmente, con la Unión Europea, no es nuevo. Ni siquiera durante los momentos de mayor enfrentamiento comercial con el gigante asiático el controvertido mandatario dejó de lanzar sus pullas a Bruselas, a la que siempre calificó de ser peor que China.

Tampoco es la primera vez que la Oficina del Representante de Comercio del Tío Sam saca una lista amenazadora de nombres para meter presión a sus socios comerciales. Hasta la fecha, ninguna de estas propuestas llegó a materializarse, pero con este movimiento Trump vuelve a abrir el melón de la guerra comercial y al mercado no le gusta nada el sonido de esos tambores.

Es poco probable que Trump quiera una guerra comercial con Europa ahora, pero el mercado se inquieta

De aplicarse estos aranceles, Europa se vería obligada a responder, ya que al igual que esgrime Estados Unidos, también tendría el amparo de la OMC para responder de forma proporcional a las medidas estadounidenses.

Una escalada de la situación no parece el escenario más probable ahora mismo -Europa se centra de lleno en cimentar su reconstrucción tras un frenazo económico sin precedentes y Trump solo mira ya a sus votantes- pero el hecho de que esa posibilidad en el horizonte ha vuelto a provocar en el día de hoy una nueva oleada de ventas en las bolsas y un aumento de la demanda de los activos refugio como es el caso del oro.

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