La cotización del petróleo se desploma un 30% y desata el pánico en los mercados

• El precio del petróleo crudo ligero estadounidense (WTI) marca un mínimo de cuatro años en los 27,34 dólares por barril.
• Arabia Saudí inicia una guerra de oferta contra Rusia por la negativa de Moscú a implementar los recortes de producción.
• Riad quería un recorte conjunto de un millón y medio de barriles diarios, pero en lugar de eso podría incrementar sus niveles de bombeo como represalia.

La cotización de los futuros sobre el petróleo crudo registra hoy su peor jornada desde la guerra de Irak en 1991, tras padecer un desplome que llegó a superar el 30% durante la sesión asiática.

Con la apertura de los mercados europeos, dicho correctivo se suaviza hasta situarse en torno al 20%, con la referencia estadounidense (WTI) en torno a los 32,73 dólares por barril y la europea (Brent) en los 36,37 dólares.

En los momentos más duros de la sesión, ambas variedades de petróleo llegaron a descender hasta niveles que no se veían desde los mínimos de 12 años marcados a comienzos de 2016, cuando el petróleo de Texas cayó hasta los 26,05 dólares y el del Mar del Norte, hasta los 27,20 dólares por barril.

En esta ocasión, la cotización del petróleo ligero texano ha detenido la sangría en los 27,34 dólares, mientras que el precio del barril Brent ha logrado contener las caídas en los 31,27 dólares.

El gran culpable de este movimiento de pánico vendedor que vive la materia prima más comerciada del mundo se encuentra en la decisión de Arabia Saudí de iniciar una guerra de precios como medida de castigo a Rusia.

Reunidos la pasada semana en Viena, los estados miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) no lograron el respaldo de Moscú para incrementar los recortes coordinador en otro millón y medio de barriles diarios. El enfrentamiento entre ambos bloques fue subiendo en intensidad y el encuentro se saldó con un distanciamiento entre ambas partes no visto en los últimos años.

Arabia Saudí pasa a la ofensiva e incrementará su producción de crudo como represalia

Rusia, con una mayor capacidad para resistir un entorno de bajos precios -sus petroleras encuentran la rentabilidad por encima de los 40 dólares por barril-, solo quería dar continuidad a los niveles actuales de contención más allá del mes de marzo, mientras que los países del cártel, que necesitan de unos mayores precios por barril para cuadrar sus cuentas, defendían con uñas y dientes más recortes que ayuden a equilibrar la oferta y la demanda.

La guerra comercial entre Estados Unidos y China, primero, y la irrupción del coronavirus de Wuhan después, ha provocado una notable contracción de las perspectivas de crecimiento de la economía mundial y, por consiguiente, de las proyecciones de consumo de petróleo, lo que ha mantenido bajo presión los precios de la materia prima.

En medio de este escenario, los países de la OPEP consideraban una opción de máxima urgencia seguir ajustando la oferta, pero la negativa de Rusia ha provocado la reacción contraria del reino saudita, que no solo dará por concluidos ahora los recortes en marzo, sino que podría llegar a incrementar sus niveles de bombeo en otro millón de barriles diario como medida para sacar del mercado a los perforadores rusos.

No es la primera vez que Arabia Saudí hace caer los precios del crudo contra su propio interés

No es la primera vez que Arabia Saudí adopta este tipo de estrategias que podríamos calificar de “suicidas”. Con el auge en el mercado durante los años 2013 y 2014 de los productores de esquisto estadounidenses, Riad también optó por utilizar esta táctica de la guerra de precios para echar del mercado a sus competidores a través de la baja rentabilidad.

Este movimiento, sin embargo, llega en el peor momento posible para los mercados, inmersos en su propia histeria por los efectos que la crisis del coronavirus pueda tener en la economía mundial y que ha disparado la salida en masa de los mercados bursátiles, provocando un auténtico lunes negro en los mercados.

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