Lagarde, próxima presidenta del BCE, aboga por una política monetaria muy acomodaticia

• La comisión de Asuntos Económicos y Monetarios del Parlamento vota hoy la idoneidad de Lagarde para presidir el BCE.
• La política francesa utiliza un lenguaje y un tono similar al empleado por el todavía presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi.
• El mercado espera que el próximo jueves el BCE anuncie importantes medidas de política monetaria para estimular la economía.

La candidata para suceder a Mario Draghi como presidenta del Banco Central Europeo (BCE) y última presidenta del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, ha asegurado hoy que, dada la actual situación económica de la región, todavía sería necesario que la autoridad mantenga una política “altamente acomodaticia por un periodo prolongado de tiempo”.

Al menos así lo ha expuesto durante su comparecencia ante la Comisión de Asuntos Económicos y Monetarios del Parlamento Europeo, que hoy mismo decidirá si es la persona adecuada para ocupar la silla de “Super Mario” a partir del próximo 1 de noviembre.

Dada la propia idiosincrasia y los repartos de poder de la política comunicaría, dicha votación de la Comisión no debería ser más que un trámite, que será ratificado después por el pleno del Parlamento entre los días 16 y 19 de septiembre.

En cualquier caso, durante su intervención, Lagarde ha empleado un tono muy continuista con la línea empleada en sus últimas comparecencias por el propio Mario Draghi, mandando un mensaje de tranquilidad a los países de la periferia del euro, que ven cada vez más necesario que el banco central vuelva a sacar su artillería de estímulos.

Lagarde recordó, además, que la economía de la zona euro deberá hacer frente a riesgos importantes en el corto plazo, con una inflación “persistentemente demasiado baja”, sin perder de vista los efectos negativos que podrían tener las políticas monetarias no convencionales, como las utilizadas durante la última gran crisis y a las que todo parece indicar que la entidad volverá a recurrir antes incluso de que acabe el presente año.

De igual modo, la política francesa ha remarcado que el BCE deberá “escuchar” y “entender” a los mercados, pero que no debe ser guiado por ellos en ningún caso.

El mercado espera que el Banco Central Europeo (BCE) anuncie ya medidas de estímulo

Las palabras de Christine Lagarde se producen también apenas una semana antes de que el próximo 12 de septiembre el Consejo de Gobierno del Banco Central vuelva a reunirse en un encuentro en el que el mercado tiene depositadas grandes expectativas.

Tras el cambio en el lenguaje del comunicado visto en las últimas reuniones, el mercado da por hecho que la entidad pasará a la acción en su próximo encuentro y que lo hará, además, de forma ambiciosa, con potenciales recortes de los tipos de interés de referencia hasta niveles negativos por primera vez en la historia de la entidad o la puesta en marcha de un nuevo programa de compra de activos.

Voces dentro del BCE advierten de que la próxima reunión de la entidad podría decepcionar

Sin embargo, diferentes voces dentro de la entidad han lanzado serios avisos a navegantes y han alertado de que los que alberguen grandes esperanzas respecto a las medidas a anunciar por el Banco Central Europeo podrían verse seriamente decepcionados.

En este sentido, la propia entidad se encontraría muy divida entra las llamadas ‘palomas’, que defiende políticas más acomodaticias (encarnadas en los bancos centrales de España, Italia, Grecia, Finlandia o Portugal, entre otros), frente a los conocidos como ‘halcones’, partidarios de una mayor disciplina (Alemania, Australia, Holanda y Letonia).

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