- Elon Musk comentó en agosto en redes sociales la posibilidad privatizar la compañía.
- Situaba el precio de salida para logar su exclusión en los 420.
- El directivo aseguraba contar con los fondos necesarios para ello.
- Aunque la opción fue descartada, el directivo afronta ahora posibles cargos por delitos civiles y criminales.
Los títulos de Tesla caen un 2% a falta de tan solo una hora para la apertura del mercado y da continuidad así al fuerte descenso de ayer (-3,35%) tras conocerse que el Departamento de Justicia de Estados Unidos también ha iniciado una investigación sobre las polémicas declaraciones del consejero delegado de la compañía, Elon Musk, realizadas en Twitter sobre una posible exclusión de negociación de la empresa.
El pasado 7 de agosto, el controvertido directivo sorprendía a propios y extraños con un escueto tweet: “Estoy pensando en privatizar Tesla a 420 dólares” y afirmaba contar con el respaldo económico necesario para hacerlo.
Por aquel entonces, los títulos de la compañía negociaban en torno a los 340 dólares por acción, por lo que la cantidad propuesta por Musk se situaba casi un 25% por encima de su precio de mercado. Los inversores se tomaron verdaderamente en serio las palabras del fundador de la empresa y los títulos del fabricante de vehículos electrónicos pusieron fin a la sesión en los 379,57, tras firmar una subida en el día del 10,99%.
Tras dos semanas de especulaciones, finalmente, el 24 de agosto, el propio Elon Musk descartaba la posibilidad de excluir la compañía de negociación tras asegurar que la mayoría de los accionistas consideraban mejor para la firma seguir siendo una sociedad cotizada.
Su cotización cae más de un 15% desde entonces
Desde aquel anuncio, las acciones de Tesla solo han registrado cuatro cierres en positivo y se encuentran ahora por debajo ya de los 285 euros, tras llegar a marcar mínimos de cinco meses en los 252,39 dólares.
De este modo, la compañía negocia ahora más de un 15% por debajo de los 340 dólares a los que se cambiaba antes del primer tweet de Musk, en torno a un 25% lejos del precio de cierre de aquel día y con un precio casi un tercio inferior al propuesto como precio de compra para la exclusión.
Además de la pérdida de credibilidad entre los inversores, el exceso tuitero de Musk puede tener implicaciones más serias, tanto para la compañía como para su propia persona. Según informa Bloomberg, el fiscal federal de Estados Unidos ha abierto una investigación por fraude sobre el directivo en la que se analizaran pruebas por si existiese un delito de carácter criminal y no sólo civil en la publicación de los comentarios en redes sociales.
Tesla confirma la investigación del Departamento de Justicia
La propia compañía ha confirmado en un comunicado la recepción de una solicitud voluntaria de información por parte del Departamento de Justicia, pero niega que se haya solicitado ninguna citación o comparecencia para declarar sobre el asunto.
Esta investigación por parte de la Justicia estadounidense se suma a la que ya ha puesto en marcha la Comisión de Bolsa y Valores (SEC), para tratar de decidir si hubo negligencia o intención de manipular el mercado por parte de Musk cuando realizó sus comentarios.