La libra cae a mínimos de la semana tras otra jornada infructuosa en el Parlamento británico

• La Cámara de los Comunes vuelve a fallar a la hora de ofrecer soluciones alternativas al Brexit.
• Theresa May ofrece su cabeza a cambio de que se apruebe su acuerdo de salida, pero no logra apoyo suficiente.
• Si no se aprueba el acuerdo esta semana, Reino Unido tendrá que salir de la UE el 12 de abril o pedir una prórroga duradera.

La absoluta falta de progresos significativos que ayuden a esclarecer el futuro del Brexit mantiene a la libra esterlina sometida a una fuerte presión y llevan al par GBP/USD a su nivel más bajo de la semana en los primeros compases de la sesión europea.

En concreto, el ‘cable’ marcaba hoy a las 9:15 horas un mínimo intradía en los 1,3127 dólares por moneda de la Reina, niveles que no visitaba desde el pasado viernes, 22 de marzo, para tratar de buscar a continuación de nuevo al nivel de los 1,3150 dólares por libra.

A falta de 24 horas para que se cumpla oficialmente la fecha de salida planteada inicialmente (29 de marzo) y que ahora delimita el plazo dado por la Unión Europea para rubricar el acuerdo de salida negociado entre Londres y Bruselas, el Parlamento británico ha vuelto a mostrarse incapaz de encontrar una salida al callejón sin salida que se ha convertido el laberinto del Brexit.

Ayer, en una nueva jornada maratoniana que se prolongó hasta el filo de la media noche, sus señorías de Westminster volvieron a fallar sonoramente a la hora establecer una hoja de ruta que permita un acuerdo sin traumas con la Unión Europea.

El Parlamento rechaza también todas las alternativas propuestas al acuerdo de May

Arrebatado de forma momentánea el control de las riendas el proceso a la primera ministra, Theresa May, la Cámara de los Comunes se pronunciaba anoche sobre una serie de propuestas alternativas al acuerdo negociado por May.

Aunque dichas votaciones no tenían un carácter vinculante, ninguna de las siete iniciativas propuestas fue capaz de recabar el apoyo suficiente de la Cámara y solo dos de ellas estuvieron cerca de lograrlo.

Por un lado, la posibilidad de que el Reino Unido rebaje sus pretensiones en el Brexit y negocie la posibilidad de permanecer en la unión aduanera fue derrotada por una diferencia de solo 8 votos (264 a favor vs. 272 en contra), mientras que la alternativa de convocar un segundo referéndum fue rechazada por 27 votos de diferencia (268 vs. 295).

May ofrece su cargo a cambio de que se apruebe su acuerdo, pero no logra apoyo suficiente

Paralelamente, en un nuevo intento a la desesperada por conseguir apoyos para su acuerdo de salida, May prometió renunciar a su puesto si el texto ya aprobado por sus homólogos comunitarios era secundado en sede Parlamentaria.

En un primer momento, la idea atrajo a un gran número de miembros discrepantes dentro del Partido Conservador, como Boris Johnson, Iain Duncan Smith o Jacob Ress-Mogg, pero finalmente, al no contar con el apoyo de sus socios de Gobierno, los norirlandeses del Partido Unionista Demócrata (DUP), May carece todavía del apoyo necesario para aprobar su acuerdo y la libra reacciona a la baja.

Las conversaciones con el DUP continuarán a lo largo del día de hoy y la divisa esterlina seguirá agitándose a golpe de rumores y titulares de prensa, pero por el momento, la opción que parece más probable es que el Reino Unido solicite una prórroga duradera a la Bruselas con el objetivo de evitar un Brexit duro el próximo 12 de abril, fecha marcada por la UE para la salida si no hay un acuerdo de salida.

May podría intentar una tercera votación a la desesperada de su acuerdo

Pero si algo ha demostrado May durante los últimos meses y, especialmente, durante las últimas semanas, es su tenacidad y podría volver a tirar los dados y someter a una tercera votación su dos veces rechazado acuerdo, con la esperanza de que se produzca un último giro de los acontecimientos.

El miedo por parte de los brexiteers acérrimos a que una prórroga prolongada de la fecha de salida reduzca el divorcio con Bruselas a la mínima expresión o termine incluso por revocar todo el proceso, juega a favor de May y podría permitir que se llegase al final del día 29 de marzo con un acuerdo aprobado, que haga oficial la salida del Reino Unido de la Unión Europea el próximo 22 de mayo de forma pactada.

Por el momento, si este giro de los acontecimientos no se produce, el Parlamento volverá a someter a votación el próximo lunes nuevas alternativas al proceso, pero en esta ocasión bajo la premisa de que habrá más tiempo para negociar y estudiar otras salidas, toda vez que el acuerdo de May haya perdido ya todos sus argumentos y credibilidad ante la Cámara.