- M5S y La Liga imponen su criterio sobre la opinión del ministro de Finanzas.
- El objetivo del 2,4% está dentro del límite oficial de la eurozona del 3% pero por encima del compromiso adquirido del 2%.
- Los inversores huyen de la renta pública italiana, que arrastra a los bancos en su caída.
- Intesa Sanpaolo lidera las caídas en el Euro Stoxx 50.
Las plazas europeas registran fuertes caídas en la sesión del viernes, arrastradas por las ventas masivas en Italia, después de que el Gobierno transalpino haya acordado finalmente incluir un déficit público del 2,4% en el primer borrador de los presupuestos generales para el próximo año.
Aunque esta meta estaría dentro de la normativa comunitaria de mantener los déficits presupuestarios por debajo del 3%, el Ejecutivo de Roma se había comprometido a mantener dicha magnitud por debajo del 2%, en un esfuerzo para seguir reduciendo sus niveles de endeudamiento, que en la actualidad se sitúan en torno al 130% de su producto interior bruto.
Las negociaciones se han mantenido en un creciente estado de tensión entre los dos partidos que forman la coalición, La Liga y el Movimiento 5 Estrellas, y el ministro de Finanzas, el independiente Giovanni Tria.
Mientras este último abogaba por cumplir la palabra dada a Bruselas y mantener el déficit entre el 1,6% y el 1,9%, los líderes de los dos partidos populistas abogaban por ampliar esta cifra para dar cabida a sus propuestas electorales, como la reforma del sistema de pensiones o la introducción de una renta básica universal.
Finalmente, la opinión de los miembros de la coalición se ha impuesto sobre la de Tria, lo que ha situado a este último al borde de la dimisión. Según informan medios italianos, ha sido la intervención de Sergio Matarella, presidente de la República, la que ha impedido que el frustrado ministro tomase la puerta de salida con el objetivo de evitar así una “situación de caos”.
El FTSE Mib se desploma un 2,5%
Así las cosas, alcanzada la primera hora de negociación, el FTSE Mib caía un 2,49% y condenaba a los números rojos al resto de plazas europeas, con el Ibex 35 un 0,96% a la baja, por delante del Dax alemán (-0,82%), el Euro Stoxx 50 (-0,80%), el PSI 20 portugués (-0,64%), el Cac 40 (-0,55%) y el FTSE 100 (-0,14%).
La decisión de los políticos italianos no gusta nada a los tenedores de deuda del país, que vende de forma masiva las obligaciones del país. Así, la rentabilidad del bono a 10 años en el mercado secundario marca un nuevo máximo de tres semanas, por encima otra vez del nivel del 3%; al igual que sucede con la prima de riesgo, que vuelve a dispararse por encima de los 265 puntos.
La presión sobre la deuda pública arrastra a los bancos
La renovada presión sobre la deuda romana se traduce en una nueva oleada de ventas a su vez en el sector financiero europeo y, especialmente, en los bancos de la periferia. Asimismo, las utilities siguen digiriendo las subidas de tipos de interés en Estados Unidos y se sitúan también entre los sectores más castigados de la jornada.
De este modo, las italianas Intesa Sanpaolo (-5,93%) y Enel (-3,21%) lideran los recortes en el selectivo de blue chips europeo, por delante de Société Générale (-2,58%), BASF (-2,24%), BNP Paribas (-2,25%), ING Groep (-2,15%) y Deutsche Bank (-2,03%), todas ellas con descensos superiores al 2%.
Por el contrario, solo 11 valores de los 50 que componen el índice paneuropeo negocian en positivo, entre los que destacan las subidas de la firma de lujo francesa LVMH (+0,73%) y de la compañía holandesa de distribución Ahold Delhaize (+0,59%), en una sesión más favorable para los sectores lujo y viajes, alimentación y bebidas y cuidados de la salud.