- El IPC se desacelera cuatro décimas en septiembre, hasta el 2,2% interanual.
- La lectura subyacente se estanca contra pronóstico.
- Los números verdes vuelven a parecer en Nueva York superada la primera media hora de negociación.
- Las tecnológicas, las más castigadas ayer, lideran hoy el rebote del mercado.
La notable desaceleración del índice de Precios al Consumo (IPC) en Estados Unidos en el mes de septiembre ha llegado como un bálsamo para los mercados financieros, en plena agitación por las últimas ventas registradas en el mercado de renta fija y que habían elevado por encima del 3,25% la rentabilidad del bono a 10 años por primera vez desde el año 2011.
Temían los inversores que la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos se viese obligada a endurecer a marchas forzadas su política monetaria por un posible sobrecalentamiento de la economía estadounidense, lo que provocó una salida en tromba de la deuda soberana del Tío Sam, que arrastró en su caída a la renta variable.
Ahora, la relajación de las presiones inflacionistas ha logrado limitar por momentos la histeria vendedora que se había adueñado del mercado y permite rebotar con timidez a los principales índices de la Bolsa de Nueva York, cuyos futuros se pasaron toda la sesión europea apuntando a que Wall Street abriría con nuevas caídas próximas al 1%.
El IPC de Estados Unidos se desacelera cinco décimas en septiembre
Según las últimas cifras publicadas hoy, el IPC de Estados Unidos se contrajo cuatro décimas en el mes de septiembre, hasta el 2,3% interanual, con un avance mensual de los precios de tan solo una décima, frente al incremento en un 0,2% previsto por los analistas.
Del mismo modo, la lectura subyacente, aquella que excluye para su cálculo los precios de los componentes más volátiles de la cesta de la compra, como los carburantes o los alimentos frescos, también ha resultado más tranquilizadora de lo previsto, al repetir en septiembre los mismos resultados que en agosto (+0,2% mensual y +2,2% interanual).
De este modo, a las 16:03 horas, superada la primera media hora de negociación, el Nasdaq, el gran perjudicado en la sesión de ayer, lideraba los rebotes con un avance del 0,68%, por delante de las pequeñas empresas del Russell 2000 (+0,32%), el Dow Jones de industriales (+0,19%) y el S&P 500 (+0,12%).
Fabricantes de semiconductores y otras tecnológicas lideran el rebote
Por sectores, entidades financieras, energéticas, cuidados de la salud y utilities se mantenían todavía en terreno negativo; mientras que fabricantes de semiconductores y otras tecnológicas guiaban el rebote en las acciones estadounidenses.
Dentro de los 30 componentes del Dow Jones, Nike lidera los avances con una subida del 1,99%, por delante de Walgreens Boots Alliance (+1,40%), que se reconcilia con los inversores tras presentar unos resultados mixtos y que la condenaron pasar todo el premercado con caídas superiores a las de los índices.
Del lado de las caídas, McDonald's (-1,55%) y Pfizer (-1,54%) encabezan los descensos por delante de las petroleras Chevron y (-1,17%) y Exxon Mobil (1,13%), que se ven arrastradas por la fuerte corrección de los precios del crudo antes de la publicación de nuevos datos oficiales sobre la evolución semanal de los inventarios en el país, retrasados en esta ocasión al jueves por el festivo del pasado lunes en Estados Unidos.