- Europa comienza con datos dispares, aunque sin grandes variaciones frente a los precios de cierre del viernes.
- China vive una nueva jornada de ventas masivas, pero Japón y Corea del Sur cierran en positivo.
- Estados Unidos baraja ahora la posibilidad de ampliar los aranceles a productos por valor de otros 267.000 millones.
- China tendría que pensar en otro tipo de medidas de represalia si quiere igualar los gravámenes de Trump.
Las bolsas europeas muestran números mixtos en la primera hora de negociación de la semana. Las tensiones comerciales escalan un peldaño más después de que el presidente estadounidense, Donald Trump, amenazase el pasado viernes con imponer aranceles a la totalidad de productos chinos que llegan al país.
De este modo, Trump eleva la apuesta y la amenaza actual que pende ahora sobre productos chinos por valor de 200.000 millones de dólares podría extenderse a la totalidad de bienes del gigante asiático, lo que supondría extender los gravámenes a productos por valor de otros 267.000 millones de dólares extra.
Algunas compañías estadounidenses, como Apple, ya han manifestado que estas medidas dañarán sus cuentas ya que estos impuestos a la entrada de bienes chinos en Estados Unidos afectarán directamente a alguno de sus productos como el Apple Watch, los AirPods, o los adaptadores y cargadores de muchos de sus gadgets. La respuesta del polémico mandatario no se ha hecho esperar y ha exhortado a la firma de la manzana a dejar de producir en China y hacerlo en Estados Unidos.
Por su parte, el gigante asiático mantiene que habrá medidas de represalia, pero la cantidad de productos que el país compra a Estados Unidos es inferior a la que vende, por lo que si el Gobierno de Xi Jinping quiere responder al ataque en similares proporciones tendría que implantar otro tipo de barreras comerciales más allá de los aranceles o emprender otras medidas como dejar de comprar deuda estadounidense, devaluar la moneda o penalizar las empresas estadounidense con actividad dentro de sus fronteras.
Así, a las 9.44 horas, las bolsas europeas navegaban sin rumbo concreto y sin grandes diferencias respecto al cierre del pasado viernes, con caídas del 0,14%, el 0,06% y del 0,02% para el Dax alemán, el FTSE 100 británico y el Cac francés, respectivamente; y avances del 0,07% para el Ibex 35 y del 0,14% para el Euro Stoxx 50.
Italia vuelve a desmarcarse del resto de índices europeos con una subida del 1% para el FTSE Mib. El mercado sigue confiando en el renovado compromiso con el objetivo del déficit público del ministro de Finanzas, Giovanni Tria, y la presión sobre la deuda italiana sigue reduciéndose. La rentabilidad de las obligaciones transalpinas a 10 años se contrae hoy de nuevo un 4%, hasta el 2,75%, su nivel más bajo desde el pasado 31 de enero.
Las plazas asiáticas también presentan números mixtos al cierre de la jornada, con sendas subidas del 0,31%, en Japón y Corea del Sur y ventas generalizadas en China. En concreto, el índice compuesto de Shenzhen lideró los descensos dentro del país (-1,97%), por delante del de Shanghái (-1,21%) y el China A50 (-0,87%), mientras que el retroceso del Hang Seng de Hong Kong se situó en el 1,28%.
Al otro lado del Pacífico, los futuros sobre los principales índices estadounidense apuntan a un rebote en la apertura de Nueva York de en torno al cuarto de punto, tras poner fin a la sesión del viernes con nuevas caídas.
