- El IPC de diciembre de China se sitúa en el 0,0%, mientras que la inflación mayorista registra su peor dato desde 2016.
- La falta de avances significativos en las relaciones comerciales entre Pekín y Washington tampoco gusta a los inversores.
- Los números rojos se imponen en Asia y Europa y los futuros apuntan a una apertura negativa en Wall Street.
La publicación de los datos de inflación mayorista y minorista de China relativos al mes de diciembre pone de nuevo de manifiesto el momento de dificultad que atraviesa en la actualidad la economía del gigante asiático como consecuencia de la guerra comercial con Estados Unidos, lo que ha frenado el movimiento alcista que registraban los mercados bursátiles desde comienzos de año.
En concreto, el índice de precios al consumidor (IPC) muestra como el coste de la cesta de la compra de los ciudadanos chinos no ha registrado avance alguno entre noviembre y diciembre, frente al crecimiento en tres décimas esperado por los inversores; mientras que la comparativa interanual se desacelera en el último mes de 2018 hasta el 1,9%, frente al 2,2% del mes anterior y el 2,1% estimado por los analistas.
Por su parte, el índice de precios al productor (IPP) muestra un pinchazo aún mayor de la inflación mayorista, con una progresión interanual de los precios pagados a los productores del 0,9%, frente al 2,7% registrado en noviembre y al 1,6% esperado por el mercado. Estas cifras suponen el peor registro desde que este indicador volviese a entrar en terreno positivo en septiembre de 2016 tras cuatro años en contracción.
De este modo, los números rojos se imponen hoy en la apertura europea y en los futuros de los principales índices estadounidenses, tras consumarse el cierre en negativo de las principales plazas asiáticas, a excepción de algunos índices de la propia China y Hong Kong, que ven en los resultados macroeconómicos una señal de que el Gobierno de Pekín tendrá que anunciar nuevas medidas de estímulo.
El mercado esperaba más de las conversaciones entre China y Estados Unidos
La finalización de las conversaciones entre China y Estados Unidos también contribuye a que las órdenes de venta se impongan a las de compra en los mercados bursátiles. Por un lado, los compraron con el rumor, venden ahora con las noticias, al mismo tiempo que, analizando las conclusiones del encuentro, inversores y analistas ven más palabras bonitas que hechos concretos que demuestren verdaderos avances en la disputa comercial.
Así las cosas, a las 10:47 horas, el Cac 40 francés encabezaba la toma de beneficios en el Viejo Continente, con un retroceso del 0,78%, seguido por el Dax alemán (-0,47%), el Euro Stoxx 50 (-0,45%) y FTSE 100 londinense (-0,32%).
Mejor comportamiento presentan los selectivos de la periferia europea, con un mínimo retroceso del 0,08% para el FTSE Mib italiano y ligeros avances del 0,02% y del 0,10% para el Ibex 35 español y el PSI 20 portugués, respectivamente.
