¿Cómo funcionan las letras del Tesoro?
Las letras del Tesoro operan como un mecanismo de subvención para el Estado y uno de inversión para el ahorrador. Por su vigencia en el corto plazo, se consideran generalmente como una inversión financiera con mayor liquidez y de menor riesgo por contar con la garantía del gobierno emisor, por lo que resultan atractivos para inversores, y para porfolios con un perfil más conservador.
Las letras del Tesoro no pagan intereses periódicos, sino que una vez que se cumple el plazo de la letra. Los intereses serán determinados por la diferencia entre el precio de compra y el valor nominal (precio de venta) del activo.
El subscriptor (inversor) realizará una petición que será clasificada (con el resto de la oferta) en la subasta donde se determinará el volumen nominal a emitir y el precio de compra mínimo aceptado. El importe para la adquisición de una letra del Tesoro será inferior al valor nominal, es decir, el capital invertido equivale al precio de compra. Al cumplimiento del plazo, el inversor percibirá el valor nominal de la letra.