Los CFD sobre acciones tienden a ser una forma más accesible de operar con acciones en comparación con la compraventa tradicional, particularmente en lo relacionado a la forma en que se abre una posición y los costos involucrados.

La mecánica de las operaciones

En la compraventa de acciones tradicional, se compran y venden las acciones directamente a un precio de mercado determinado. Sin embargo, los CFD sobre acciones no implican la propiedad de la acción real y, en su lugar, se operan en contratos normalizados. El tamaño del contrato equivale normalmente a una acción de la compañía con la que operas. Por ejemplo, para abrir una posición que equivale a la compra de 500 acciones de Apple, compras 500 contratos de CFD de Apple.

Las operaciones con CFD siempre están en la misma divisa que el activo subyacente. Así que como Apple es una acción estadounidense, el precio del CFD se cotiza en dólares. Si los dólares no son la divisa base de tu cuenta, puede haber un cargo por conversión de divisa para cambiar cualquier beneficio que obtengas a tu divisa habitual. En IG nuestro coste estándar es del 0,5 % y normalmente haremos la conversión automáticamente.

Los costos

En la inversión tradicional, se suele operar mediante un bróker que compra o vende las acciones en tu nombre. Tu bróker negocia las acciones al precio actual de compra o venta disponible en el mercado subyacente y te cobra una comisión, basada en el valor de las acciones.

Cuando operas con CFD sobre acciones, los costes de la negociación están diseñados para replicar el trading en el mercado subyacente. Los proveedores igualarán los precios de compra y venta del mercado subyacente y cobrarán una pequeña comisión al abrir y cerrar una operación.

Estos son algunos ejemplos de las comisiones estándar de IG, por región, para los CFD sobre acciones:

Posiciones cortas

Al operar con CFD sobre acciones, es más fácil ir corto que a través de la inversión tradicional, porque se opera sobre el precio de las acciones, en lugar de comprar y vender estas físicamente.

En el trading de CFD, puedes abrir una posición de «venta» en el mercado que elijas, algo tan sencillo como comprar. Para beneficiarte de la caída del precio de las acciones mediante inversión de tradicional, tendrías que encargar a un bróker que las pidiera prestadas en tu nombre y luego las vendiera. Puedes encontrar más información sobre ese proceso en el curso «Cómo funciona el trading».

Apalancamiento vs. no apalancamiento

Con los CFD sobre acciones, tu desembolso para abrir una posición es mucho menor de lo que sería si compraras acciones de la manera tradicional, ya que los CFD son un producto apalancado. Esto significa que cuando realizas una operación equivalente a la compra de, digamos, 1000 $ de acciones, puede que solo tengas que hacer un depósito —también conocido como margen— del 5 %, o 50 $, en lugar de la suma total. Puedes encontrar más información sobre el apalancamiento en el curso «Órdenes, ejecución y apalancamiento».

Sin embargo, es importante recordar que tu pérdida potencial es la misma tanto si operas con las acciones subyacentes como si realizas una operación con CFD. En el ejemplo anterior, si se alcanza el peor escenario y la acción pierde todo su valor, tu máxima pérdida posible es de 1000 $ en ambos casos.