¿Qué es el riesgo de tipo de interés?

¿Cuál es el riesgo de los tipos de interés?

El riesgo de los tipos de interés es la probabilidad de que tu capital (e inversiones) puedan perder valor debido a los cambios en los tipos de interés.

Para los inversores de bonos, esto plantea un grave riesgo. Cuando los tipos de interés suben, los vehículos de inversión de tipo fijo como los bonos pierden valor. También sucede lo contrario: cuando los tipos de interés bajan, el valor de los bonos sube. Por este motivo, muchos inversores utilizan sus posiciones de bonos como cobertura ante las subidas de los tipos, como parte de la cartera de inversión diversificada.

De hecho, los tipos de interés son uno de los principales factores determinantes del precio de un bono (cuando los tipos de interés suben, los precios de los bonos del mercado secundario caerán inmediatamente de forma que los rendimientos puedan seguir siendo competitivos con las nuevas emisiones de bonos, que están fijadas según los tipos de interés más recientes y más altos).

Hay dos riesgos principales relacionados con la inversión en bonos: el riesgo crediticio, que es el riesgo de que la empresa o gobierno no pueda devolver el capital al final del vencimiento del bono, y el riesgo de los tipos de interés, que es el riesgo de que el valor de un activo caiga debido a las subidas de los tipos de interés.

En ausencia de un riesgo crediticio importante, los titulares de bonos deben asegurarse siempre de que conocen el riesgo de los tipos de interés y adoptar medidas para compensarlo.

Los tipos de interés y los precios de los bonos se mueven en direcciones opuestas

Un principio clave de la inversión en bonos es que los tipos de interés del mercado y los precios de los bonos se moverán siempre en direcciones opuestas. Cuando los tipos de interés del mercado suban, el precio de los bonos de tipo fijo caerá.

Según la Comisión de Valores y Bolsas, el riesgo de los tipos de interés es común a todos los bonos, incluso los bonos emitidos por el Estado.

Los bonos a largo plazo conllevan más riesgo, pues cuanto más extenso sea el período temporal, mayores son las posibilidades de que se produzcan subidas de los tipos de interés, que reducirán el valor del bono. Es en este caso cuando puede ser útil mantener una variedad de bonos con distintos vencimientos.

Además, los bonos suelen ofrecer un dividendo fijo o un cupón hasta que el bono alcanza la madurez. Dado que se podría estar ganando un tipo de interés más alto en otro lugar, en este momento estos importes de los cupones fijos «pagan mal» la inversión. Si al bono solo le quedan unos pocos pagos de cupones, el efecto acumulado de esta remuneración insuficiente no será tan negativo como si al bono le quedasen muchos cupones por pagar.

Los emisores de bonos harán los cupones de bonos a largo plazo tan atractivos como les resulte posible para los inversores con el fin de ayudarles a compensar el efecto negativo de las subidas de los tipos de interés. Sin embargo, los inversores de bonos estacionales intentarán seguir reduciendo el riesgo de las subidas de los tipos manteniendo una amplia variedad de bonos a largo, medio y corto plazo.

Como se ha señalado, es menos probable que las posiciones de bonos a corto plazo se devalúen debido al riesgo de los tipos de interés, simplemente porque hay menos tiempo para que se produzcan múltiples subidas de los tipos de interés y porque se hacen menos pagos de cupones, con lo cual se reducen los efectos acumulados de la posible insuficiencia de los pagos.

Como consecuencia de esta relación, los traders e inversores deberían ser especialmente conscientes de los riesgos de los tipos de interés cuando compran bonos.

En términos generales, hay dos tipos de posiciones de bonos: bonos del Estado y bonos corporativos.

Bonos del Estado

Se trata de instrumentos de deuda emitidos por gobiernos que tratan de obtener efectivo. Cuanto más estable se considere la economía del país, menor será el riesgo de que el gobierno incurra en incumplimiento de pagos, y menor será la tasa del bono.

Bonos corporativos

Igual que los bonos del Estado, cualquier empresa que trate de obtener dinero puede emitir bonos corporativos. Las agencias de calificación, como Moody’s, EthiFinance Ratings e Inbonis, les otorgan a las empresas una calificación crediticia. Como sucede con los bonos del Estado, cuanto mayor sea la calificación crediticia de la empresa, menor será la rentabilidad, lo cual refleja el menor riesgo percibido. Cuanto mayor sea el tipo de interés, mayor será el riesgo de que la empresa incurra en incumplimiento de pagos de los bonos.

Cómo operar o invertir en bonos

Cómo mitigar el riesgo de los tipos de interés

Se puede compensar el riesgo de subida de los tipos de interés al garantizar que se cuenta con una cartera de inversión diversificada, que incluya tanto bonos como acciones. También se pueden usar instrumentos de cobertura para compensar el riesgo de subida de las tasas de interés.

Diversificación

Puedes diversificar tu cartera añadiendo valores que sean menos vulnerables a las fluctuaciones de los tipos de interés.

Las inversiones en acciones no están correlacionadas con el riesgo de los tipos de interés, pues su desempeño depende del éxito de la empresa y de las fluctuaciones del mercado de valores en general, y no de la inflación ni de las tasas de interés del mercado. Una cartera de inversiones diversificada contendrá una combinación de bonos y acciones.

Si se mantiene una cartera únicamente de bonos, también se puede diversificar a través de un equilibrio con bonos a corto plazo y a largo plazo.

Cobertura

Se puede mitigar el riesgo de las tasas de interés con inversiones que ofrezcan cobertura ante la posibilidad de que los bonos pierdan valor. Se trata de una estrategia de inversión defensiva que ha sido diseñada para minimizar las pérdidas y no para maximizar los beneficios.

Puedes cubrirte ante el riesgo de las tasas de interés mediante el trading de distintos tipos de derivados. De esta forma, no serás tan vulnerable a la posibilidad de que la subida de las tasas devalúe la rentabilidad de los bonos.

Puedes usar derivados como CFD para especular sobre la probabilidad de que el valor de una inversión determinada suba o baje. Al combinar esta estrategia con una cartera de bonos, podrás minimizar de forma efectiva el riesgo de pérdidas independientemente de cuánto suban los tipos de interés.

Técnicas para operar con los tipos de interés

Puedes utilizar tanto futuros sobre tasas de interés como futuros sobre bonos para operar con los movimientos de las tasas de interés. Pueden utilizarse cuatro técnicas principales en este caso:

1. Especular con la subida de las tasas de interés yendo corto sobre futuros de bonos o largo sobre futuros de las tasas de interés.
2. Especular con la caída de las tasas de interés yendo largo sobre futuros de bonos o corto sobre futuros de las tasas de interés.
3. Buscar cobertura ante el riesgo de las tasas de interés mediante la creación y el mantenimiento de una cartera diversificada compuesta por bonos y acciones.
4. Buscar cobertura ante la inflación a través de CFD para diversificar las posiciones de bonos.

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Resumen sobre el riesgo de los tipos de interés

• Cuando las tasas de interés suben, los valores de los bonos caen, lo cual se conoce como riesgo de las tasas de interés.
• El riesgo de las tasas de interés afecta a todos los activos de precio fijo como los bonos.
• Los bonos a largo plazo son especialmente vulnerables a los cambios en los tipos de interés.
• Puedes gestionar la exposición al riesgo de las tasas de interés al crear carteras diversificadas y utilizar instrumentos de cobertura.
• Los CFD pueden utilizarse también para ayudar a obtener cobertura ante la subida de los tipos de interés.